Juegos tradicionales
Juegos tradicionales son los juegos
infantiles clásicos o tradicionales, que se realizan sin ayuda de
juguetes tecnológicamente complejos, sino con el propio cuerpo o con
recursos fácilmente disponibles en la naturaleza arena, piedrecillas,
ciertos huesos como las tabas, hojas, flores, ramas, etc.) o entre
objetos caseros (cuerdas, papeles, tablas, telas, hilos, botones,
dedales, instrumentos reciclados procedentes de la cocina o de algún
taller, especialmente de la costura). También tienen la
consideración de tradicionales los juegos que se realizan con los
juguetes más antiguos o simples (muñecos, cometas, peonzas,
pelotas, canicas, dados, etc.), especialmente cuando se
auto construyen por el niño (caballitos con el palo de una escoba,
aviones o barcos de papel, disfraces rudimentarios, herramientas o
armas simuladas); e incluso los juegos de mesa (de sociedad de
tablero) anteriores a la revolución informática (tres en raya,
parchís, juego de la oca, barquitos etc.) y algunos juegos de
cartas. ( o
Su objetivo puede ser variable y pueden
ser tanto individuales como colectivos; aunque lo más habitual es
que se trate de juegos basados en la interacción entre dos o más
jugadores, muy a menudo reproduciendo roles con mayor o menor grado
de fantasía. Generalmente tienen reglas sencillas. Las relaciones
sociales establecidas por los niños en los juegos, especialmente
cuando se realizan en la calle y sin control directo de los adultos
(juegos de calle), reproducen una verdadera cultura propia que se
denomina cultura infantil callejera.[1] Cuando la totalidad de la
vida de los niños se desarrolla autónomamente y de forma ajena al
cuidado de los adultos, se habla de niños de la calle. Las
relaciones entre niños (tanto las debidas al juego como a otras
interacciones) que tienen lugar dentro del entorno escolar son una
parte fundamental.
En relación al juego tradicional y su importancia según el autor La vega "Aproximarse
al juego tradicional es acercarse al folklor a la ciencia de las
tradiciones, costumbres, usos, creencias y leyendas de una región.
Resulta difícil disociar el juego tradicional del comportamiento humano,
el estudio del juego folklórico, de la etnografía o la etología."
Los juegos tradicionales
se pueden encontrar en todas partes del mundo. Si bien habrá algunas
diferencias en la forma del juego, en el diseño, en la utilización o en
algún otro aspecto, la esencia del mismo permanece. Y es curioso cómo
todos estos juegos se repiten en los lugares más remotos aún con la
marca característica de cada lugar y cultura. Si queremos estudiar estos
juegos tradicionales no deberíamos hacer una mirada
muy superficial. Los mismos son de una riqueza inimaginable cuando los
estudiamos en profundidad y en su relación con la cultura de cada
región, el momento en el que es jugado, las personas que lo jugaban.
Estas características
particulares del entorno del juego dan cuenta de una serie de aspectos histórico-socio-culturales que nos ayudan a entenderlos y a entender la propia historia y cultura de nuestros pueblos. De esto dan cuenta también los juguetes: "La historia de los juguetes es parte de la historia de la cultura del hombre".
particulares del entorno del juego dan cuenta de una serie de aspectos histórico-socio-culturales que nos ayudan a entenderlos y a entender la propia historia y cultura de nuestros pueblos. De esto dan cuenta también los juguetes: "La historia de los juguetes es parte de la historia de la cultura del hombre".